¡Muy buenas, warhammeros!
Hoy vengo con un tutorial de escenografía para disfrutar en vuestras partidas de Warhammer. Aunque ya he hecho varios elementos e incluso tableros antes, nunca me había animado a compartir un tutorial, y la verdad es que ya tenía ganas.
Resultado Final:
Cuando empecé a hacerlo no pensaba en publicar una entrada, así que no tengo todas las fotos del proceso que me habría gustado, pero bueno, no volverá a pasar con futuras piezas. Así que ya sabéis: siempre que estéis trabajando en algo para el hobby, ¡sacad fotos del proceso! No cuesta nada y os puede servir un montón, ya sea para tenerlo de recuerdo personal o para compartirlo con la comunidad en redes.
¡Y ahora sí, vamos a meternos de lleno en el proceso! Lo primero que siempre hago cuando me pongo a trabajar en una pieza de escenografía es visualizarla en mi cabeza. Necesito tener una idea clara de lo que quiero antes de ponerme manos a la obra. Una vez que la imagen está clara, hago un boceto rápido con los materiales que tengo disponibles.
En las fotos de arriba podéis ver el boceto al que me refiero. Ahí ya tengo la calavera cortada y puesta sobre el MDF, buscando la mejor posición tanto para el conjunto como para la mandíbula, que tenía claro que iba a dejar separada.
Cortar la cabeza fue todo un reto, la verdad. Al principio intenté hacerlo con alicates, pero el centro de la calavera es un bloque de plástico bastante grueso y difícil de manejar. Así que terminé usando una radial de obra para cortar todo el mazacote. No os voy a mentir, fue un poco arriesgado, pero al final salió bien.
Es un buen ejemplo de cómo, a veces, en el modelismo no todo sale como lo planeas, pero ¡eso también forma parte del proceso! La clave es adaptarse y buscar soluciones, aunque a veces impliquen herramientas un poco más bestias. 😅
Como os decía, no tengo todas las fotos que me gustaría, y en la foto de arriba ya se ve un salto bastante grande. Para cortar la plancha de MDF, usé un cutter a la medida que más me convencía. Un truco importante aquí es rebajar los cantos del MDF con el mismo cutter a un ángulo de unos 45 grados. Esto es clave para que se integre bien al ponerlo sobre la mesa de juego, evitando ese escalón feo que queda si no lo haces.
Una vez que tenía el MDF cortado, le añadí un borde con piezas de corcho fino, poniéndolas en varias capas para darle algo de profundidad al "lago" que estoy creando. Esto le da un toque más realista y, además, ayuda a darle cuerpo a la pieza.
Luego, la calavera la fijé con la termoencoladora, que es una herramienta muy barata y, en mi opinión, esencial en el modelismo.
Después cubrí todo con la pasta texturizada de Vallejo que se suele usar para las peanas. Podéis usar la mezcla clásica de cola, arena y agua, pero como ya tenía el bote de pasta decidí usarla.
En la foto de arriba veréis que he aplicado cola blanca a todo el borde para colocar las piedrecitas de diferentes tamaños. Aquí es donde entra un pequeño truco de realismo: la naturaleza es totalmente aleatoria, así que cuanto más variado sea el tipo de piedras que pongáis y más aleatorio el patrón, mejor quedará. ¡No os preocupéis por hacer que todo quede perfecto! Lo aleatorio es lo que le da realismo.
Un buen método es dejar que las piedrecitas caigan por sí solas. En lugar de colocarlas una a una con las manos, lo que yo hago es dejar que caigan desde cierta altura. Así las piedras se distribuyen de forma más natural, quedando mucho más orgánicas y realistas.
Este tipo de detalles, aunque parezcan simples, son los que realmente marcan la diferencia cuando se ve el conjunto final. Se puede aplicar tanto a la hora de colocar piedras como tufts, hierba y cualquier elemento natural.
El siguiente paso fue imprimar toda la pieza con spray negro, y después le di una capa de blanco desde arriba (en un ángulo cenital), usando un spray de proveedor asiático. ¡Ojo! No os gastéis un dineral en los sprays caros de marcas de modelismo para estas cosas. Los baratos cumplen de sobra, y así podéis ahorrar para lo que realmente importa.
Una vez que la pieza estaba bien imprimada, me puse a hacer la textura del "agua". Hay muchos productos especializados para esto, como resinas bicomponentes y otros materiales de marcas del hobby, pero en este caso decidí hacerlo a la vieja escuela. Para ello usé papel higiénico y cola blanca diluida en varias capas. No tiene mucho misterio, la idea es ir añadiendo capas de papel y cola, y trabajar todo con un pincel viejo hasta conseguir la textura que busco.
Este método es bastante económico y, aunque un poco más laborioso, el resultado puede quedar muy chulo si lo trabajas con paciencia. ¡Es uno de esos trucos sencillos pero efectivos que todo modelista debería probar!
El siguiente paso fue colocar las bolitas de plástico de proveedor asiático, que iban a simular las burbujas flotando en el lago de sangre. Las pegué con cianocrilato, y luego me puse a darle textura alrededor con la misma mezcla de pasta de papel blanco y cola que había usado antes para la base del agua.
La idea de las burbujas la vi en Instagram justo después de haber hecho ya la textura, así que si hubiera tenido la idea antes, habría pegado las bolas de plástico directamente a la base y luego habría hecho toda la textura alrededor de ellas, integrándolas mejor y ahorrándome un paso. Pero bueno, ¡así es como aprendemos y nos vamos adaptando!
Una vez que todo se secó, volví a imprimar la parte superior, pero solo con blanco. No imprimé anteriormente la mezcla de cola y papel en negro porque quería tener una base blanca para cuando aplicara la "sangre". De esta manera, los tonos brillantes de la sangre iban a destacar mucho más sobre la base blanca, y el contraste sería mucho más impactante.
Menuda chulada compañero!! y toda la razón en : ´´Lo mas simple funciona genial´´ , ganas de ver mas entradas en un futuro :D
ResponderEliminarMuchas gracias! Iremos subiendo más conforme saquemos cosas. Estamos muy atentos también a tus trabajos :)
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